
Fotografías Casa H: paula-monroy.com
De Cara a la Ola
A borde de un camino de tierra rodeados de añosos eucaliptos y cipreses, se descubre los lomajes de Punta de Lobos, Pichilemu, un paisaje solitario y elevado con el mar en su horizonte de una de las mejores olas del mundo.
​
La casa se sitúa en terreno con pendiente, por eso la importancia de respetar e integrar a las construcciones vecinas. Esta premisa acaba configurando la planta y posterior volumetría que refuerzan la voluntad de orientarnos hacia el paisaje.
Tratándose de un refugio de vacaciones, se proyectan dos volúmenes, un gran volumen público correspondiente al primer y segundo nivel, con una organización interior abierta de doble altura, que facilita la comunicación entre espacios con orientación al abierto paisaje en su lado largo.
​
El otro volumen de carácter privado ubicado en segundo nivel está destinado a un espacio más íntimo enmarcando al mar y las olas de Punta de Lobos.
​
Se consideró una materialidad sencilla, utilizando madera local. La fachada ventilada un sistema utilizado donde el revestimiento de madera instalado horizontalmente permite mayor aislación térmica y también una configuración que sintetizan la propuesta y ayudan a verla como un refugio vacacional.






Planta primer piso

Planta segundo piso





